Mi paraíso tiene que tener movimiento. Recuerdo a la divinidad de la tríada hindú, Shiva, el bailarín cósmico, el destructor, el que todo lo deshace para que después vuelva a renacer. Cuando era joven me atemorizaba, pero con los años voy empezando a comprenderlo.
domingo, 28 de abril de 2019
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