lunes, 11 de noviembre de 2019

Somos sur-Ana Tijoux


Inmensa tristeza por la renuncia de Evo Morales. Como recién escuchábamos a una analista política, una renuncia hecha a punta de pistola es un golpe de estado. Quemaron la casa de su hermana y desde el día de las elecciones, 20 de octubre, reprimieron al pueblo boliviano que lo apoyaba. Este ciclo de Evo no se termina, lo castigaron según sus palabras por indio, por sindicalista y cocalero. No lo olvidaremos.

sábado, 9 de noviembre de 2019

La muerte es siempre misteriosa. Y su misterio se acrecienta con el tiempo. Nunca me acostumbro del todo a las ausencias, que crecen y se sobredimensionan con el tiempo.
Hoy se fue un querido vecino y amigo de nuestra familia, Blas Ivars. Lo recuerdo con su sillón en la vereda en las tardes del verano o en el solcito de invierno, comentándome las inclemencias del clima de Punta Alta y preguntándome cómo había encontrado a "la mamma".
Blas fue un ser afable y dulce que siempre se quedará con nosotros, mi más fuerte abrazo a sus hijos, compañeros de infancia y la mayor de la luz para él en este, su viaje de regreso a casa.

viernes, 1 de noviembre de 2019

Por favor...si alguien me explica la relación entre las neurociencias y el budismo le quedaría sumamente agradecida. Detesto que se reduzca nuestra compleja y maravillosa humanidad a términos moleculares.

Me dice Helios que "el tiempo se enoja cuando hacemos las cosas sin él". Tal vez en la naturaleza tengamos los ejemplos más claros. A las flores tempranas puede destruirlas la helada sorpresiva. Interpretar este lenguaje, escrito en el cielo, forma parte de una sabiduría olvidada. Celebro que alguien lo recuerde en épocas en donde la espera no tiene valor. Herman Hesse, cuando escribió Siddharta, puso en boca del asceta estas palabras: "Sé meditar, sé ayunar, sé esperar". Lo más simple es lo más profundo y olvidado en este tiempo de hoy.
Tengo la sensación que en un bar cualquiera de una avenida cualquiera, café mediante y preferentemente de noche, recupero la lucidez.
Me pregunto cuando voy a dejar de vivir dentro de un cuadro sinóptico, para empezar a bailar hasta el último trazo de una de mis pinturas.

 Hace más de diez años que estoy en pareja con un coleccionista, y tengo que reconocer que me llevó mucho tiempo comprender la esencia de es...