domingo, 2 de enero de 2011
Emigrantes internos
Cuando vuelvo a Punta Alta y camino por la ciudad, la desconozco. Miro los autos, busco caras conocidas que no aparecen, recorro viejos lugares y se me van mezclando dentro mío la tristeza, los recuerdos. Cuando llego a Buenos Aires, me alegra estar en mi casa, amo la atmósfera húmeda de esta ciudad, pero desaparezco adentro de ella. Es lo que buscaba, me digo. Será por eso que escribo esto, que está mi foto en este blog, para que ustedes me conozcan, me escriban, me acompañen en el camino.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No recuerdo cómo fue que la Encíclica Rerum Novarum llegó a mis manos a fines de los 80, la leía con una mezcla de ilusión y respeto, el mis...
-
Cada tarde, abríamos las ventanas para darle paso al tiempo. La casa tenía el rumor de los grillos perdidos. A veces, el color era el mismo...
-
La luz envejece en la habitación. Y yo, pidiendo una frase, una sola frase que me sirva de escudo entre tanta fiebre. Eso necesito para no ...
-
El objetivo de esta entrada es proponer una pequeña experiencia visual. Preparen una ensalada de tomates, condimentando a gusto, con sal y a...
No hay comentarios:
Publicar un comentario