miércoles, 17 de abril de 2019


En mi caso, por el momento me conformaría con que existiera una puerta que comunicara con el cielo. La imagino cerrada con una reja y abriéndose los domingos por la mañana para que pudiéramos visitar a nuestros seres queridos. Nos contaríamos nuestras cosas y nos abrazaríamos hasta la semana siguiente.

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