Es alegre
la feria de Parque Patricios los fines de semana. Alternan algunos artesanos,
con los puestos que traen cosas de la salada y los de ropa usada, que son mis
preferidos. Me gusta revolver en esos montones multicolores desordenados, en
los que siempre encuentro algo.
Caminando
por los pasillos soleados, escucho charlar a dos hombres, sentados en sus
reposeras.
-va a estar
linda la noche, van a estar bravos los mosquitos, tenemos que conseguir
repelente.
-nada que
no se arregle con una cervecita, contesta el compañero.
Los imagino
bajo la luz de la luna, esquivándole al sueño, cuidando sus puestos, esperando
el día en el que el sol salga de una vez para todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario