lunes, 6 de junio de 2011
Un dibujo a medio hacer
Cuando vamos llegando a la mitad de la vida, y empezamos a pegar la vuelta, podemos empezar a ver el dibujo de nuestro rostro en esa hoja que alguna vez estuvo en blanco, semivacía, confusa o indefinida. Esos trazos con suerte se parecen a nosotros, ya no se puede modificarlos tanto. Sin embargo, hay una pequeña probabilidad de que el dibujo nos guste, aunque sea un poco. Hay una pequeña probabilidad, al menos, de que eso seamos, todavía, un dibujo a medio hacer.
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No recuerdo cómo fue que la Encíclica Rerum Novarum llegó a mis manos a fines de los 80, la leía con una mezcla de ilusión y respeto, el mis...
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La pintura, el dibujo, son profundos, oscuros, la palabra es la soga que me ayuda a emerger de las profundidades para poner claridad, aire,...
Me gusta la idea de ser-dibujo, pero sólo podré verlo cuando esté concluido.
ResponderEliminar«Somos la mueca de lo que soñamos ser.» Enrique Santos Discepolo.
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